"Gracias montaña por haberme dado lecciones de vida, por que fatigado he aprendido a gustar el reposo, por que sudando he aprendido a apreciar un sorbo de agua fresca, por que cansado me he detenido y he podido admirar la belleza de una flor, la libertad de un vuelo de pájaros, respirar el perfume de la sencillez, por que solo, sumergido en tu silencio, me he visto en el espejo y espantado he admitido mi necesidad de verdad y amor, por que sufriendo he saboreado la maravilla de la cumbre, percibiendo que las cosas verdaderas, aquellas que llevan a la felicidad, se obtienen sólo con fatiga, y quien no sabe sufrir nunca podrá entender".

Battistino Bonali alpinista Italiano, Fallecido en la cara norte del Huascarán – Perú 1993.

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viernes, 6 de diciembre de 2013

Sierra de Alcaraz. Por los Altos del Encebrico


En lo más profundo de la Sierra de Alcaraz (Provincia de Albacete) se encuentra un bello y apartado valle, sabiamente modelado por el Arroyo de la Peñuela, rodeado de paredes calizas y frondosos bosques y coronado en su vertiente más occidental por un mirador natural excepcional, los Altos del Encebrico. Desde sus alturas, su cota máxima alcanza los 1.533 m, se dominan los confines de esta hermosa sierra: al este, la Sierra de la Veracruz en primer término y las últimas estribaciones de la Sierra del Agua, detrás; al sur, la fabulosa Sierra del Agua; al oeste, el Calar de la Osera, la Cuerda Larga y dibujado sobre ellas la espectacular silueta del Pico Almenara, reina de estas sierras; y al norte, la Cuerda de la Atalaya y perfilándose sobre ella la Sierra de Pino Cano.